¿Qué es la Teología?

En la filosofía se dice que lo más difícil del acto de conocer es tratar de definir; podemos enumerar, describir y hablar de las  características de las cosas que nos rodean, pero es especialmente  arduo definirlas. Debido a esto  abordar, qué es la teología, resulta complejo (y muy limitado para este espacio).  Sin embargo, esto no ha sido obstáculo para que a través de la historia pensadores cristianos o no,  hayan  intentado establecer qué significa la teología.  Por ejemplo Aristóteles le daba dos sentidos a la palabra teología: Uno tenía que ver con las invenciones de mitos, y otro,  relacionado con la ciencia que habla de Dios, este último sentido dado también por  san Agustín .  En la época patrística  la teología será el conocimiento de Dios o la Trinidad, y  desde los padres griegos hasta la alta edad media,  encuentra  su origen en el estudio de las sagradas escrituras . Resulta importante un estudio histórico por que nos da luces para la elaboración de un concepto propio.

    Podemos decir que la teología cristiana es una ciencia cuyo punto de partida es la  Revelación, de ahí se da por sentado la existencia de un Dios, y además de un Dios que es capaz de comunicarse, es decir, que puede revelarse;  se  parte también de un hombre que es capaz de acoger esa revelación, que en cierta forma entiende lo que Dios quiere comunicar.  La revelación entonces, acontece en la experiencia humana y se expresa en los testimonios de fe por parte de los hombres a través de su historia. Pero existe un hecho  más fundamental  que cualquier otro para la teología cristiana, hablamos  de la  máxima revelación conocida: la encarnación de Jesús de Nazareth,  como dice Juan,  la encarnación de la  Palabra; este suceso  se ha plasmado en la historia a través de los evangelios, y son estos los que marcan de manera  concreta el fundamento de estudio de toda teología cristiana. 

En otro orden, afirmamos que “La teología es escucha atenta de los testimonios y reflexión crítica sobre la palabra revelada”    es escucha en cuanto trata de entender e interpretar la experiencia del hombre y la trascendencia,  y es reflexiva, porque hace un intento de  penetrar y conocer  estas experiencias. Decimos que busca dar respuestas, pero antes se interroga e interroga a la revelación.  Y es en ese acto donde muestra su carácter crítico.

     La teología  es ciencia en su sentido más abarcador por cuanto es conocimiento de una realidad, que es y ha sido parte del hombre.  No podemos inscribir a la teología en el significado de “ciencia” como lo entiende la modernidad, ya que uno de sus principios es que esta ciencia debe ser demostrable a través del un método científico. La teología no entra dentro de este marco, sin embargo, ofrece una manera de conocer una realidad tangible, porque afecta y modela al hombre, en su historia y en su actuar. Es ciencia en un sentido amplio porque posee un método propio, unas categorías, una estructura, se encarga de pensar  y sistematizar lo que ella llama la Revelación.

Ahora bien, esta  ciencia  ¿qué estudia?  ¿Qué  o quién es Dios?  o en cambio es una ciencia que estudia qué ha comunicado Dios, en otras palabras ¿cuál es su objeto? Decimos que Dios no es evidente, como apunta santo Tomás lo conocemos por sus “efectos” y no porque se nos muestre tal cual es, de ahí que la teología lo asuma como presupuesto de su estudio.  Este Dios que está más allá de las posibilidades humanas, es imposible de analizar,  experimentar (científicamente), o manejar, es decir, no lo podemos encerrar en un laboratorio para su análisis, el mundo no lo puede contener (en palabras teológicas).  Sólo  la  Revelación puede ser sometida a un análisis o a un estudio por parte del teólogo, pero cabe preguntarse ¿cuál es el propósito del estudio de la Revelación?, acaso no es en última instancia descubrir ¿qué o quién o cómo es  Dios?  Y que indudablemente nos lleva a otras preguntas fundamentales acerca del hombre. 
La teología parte de la fe, pero sus esfuerzos se concentran en entender aquello en lo cual cree y este esfuerzo se convierte en un saber que el hombre tiene en definitiva sobre Dios.  La teología no puede a puntar a otra cosa que no sea el conocimiento de Dios, no puede eliminar a Dios de su estudio.  Porque si no se convierte en algo distinto de lo que es, podría convertirse en  una Filosofía de la religión o una Historia de las religiones por dar algunos nombres.  Entonces podemos sintetizar lo antes expuesto a fin de dar una definición en: La teología es una ciencia que estudia la Revelación con el propósito de conocer a Dios. 







      [1] Sermon Dei (hablar de Dios)
[2] José Rovira Belloso.  Introducción a la teología  Pág. 55 BAC. 2000. 
[3] Jared Wicks. Introducción al método teológico. Ed Verbo Divino. 1996       

[4] Me parece oportuno agregar, que la teología en un sentido amplio no debe  limitarse a estudiar la  revelación cristiana.
                      

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